El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que abre la puerta a la continuidad de TikTok en Estados Unidos, siempre que China acepte un conjunto de medidas de seguridad y control sobre la operación de la plataforma. La decisión, anunciada el 26 de septiembre de 2025, pone fin a meses de incertidumbre y debate sobre una posible prohibición total del popular servicio de videos cortos, al tiempo que establece las bases para una reestructuración profunda de su modelo de negocio en territorio estadounidense.
Detalles del acuerdo marco
Según el comunicado oficial de la Casa Blanca, se creará una nueva empresa conjunta con sede en EE. UU. para gestionar la versión local de TikTok. La estructura accionarial quedará así: aproximadamente el 80 % de las participaciones estarán en manos de inversores estadounidenses, mientras que ByteDance, la matriz china, mantendrá menos del 20 % y solo un asiento en el consejo de administración, sin acceso al comité de seguridad.
Rol de Oracle como proveedor de seguridad
Oracle asumirá la responsabilidad de proteger los datos de los usuarios, garantizando que toda la información se almacene en servidores ubicados en Estados Unidos y fuera del alcance del gobierno chino. Además, la compañía supervisará el “reentrenamiento” de los algoritmos de recomendación, asegurando que su funcionamiento cumpla con las normativas locales de ciberseguridad.
Restricciones para ByteDance
El acuerdo prohíbe a ByteDance acceder al algoritmo de TikTok o intervenir en la moderación de contenido. Los modelos de recomendación deberán ser gestionados por socios de seguridad de confianza en EE. UU., lo que elimina cualquier influencia directa de la empresa china en decisiones críticas.
Impacto económico y político
La Casa Blanca califica la medida como un “triunfo diplomático” que protege a los 170 millones de usuarios estadounidenses y genera un estimado de 178 mil millones de dólares en actividad económica durante los próximos cuatro años. El presidente Trump destacó su capacidad para “cerrar acuerdos que ponen a Estados Unidos y a sus ciudadanos en primer lugar”.
Desafíos pendientes y próximos pasos
A pesar del avance, la materialización del acuerdo depende de la aprobación del presidente chino Xi Jinping. Las autoridades de Beijing han señalado que, aunque las conversaciones fueron “constructivas”, persisten “problemas más profundos que van más allá de la tecnología”.
🔹 Plazo de 120 días para completar la desinversión y los detalles de la transacción.
🔹 Durante este periodo, el Fiscal General no iniciará acciones para prohibir la aplicación.
🔹 Si China acepta las condiciones, la empresa conjunta entrará en operación y TikTok continuará activo sin restricciones.
Reacciones de China
El gobierno chino ha expresado cautela, pidiendo que Washington cree un “clima atractivo para los inversores” y evite presiones o chantajes. Beijing enfatiza la necesidad de un entorno de cooperación y respeto mutuo para que el acuerdo prospere, subrayando su disposición a apoyar inversiones chinas en EE. UU. bajo esas premisas.
En resumen, la orden ejecutiva de Trump marca un punto de inflexión en la saga TikTok‑EE. UU., al proponer una solución que combina control nacional de datos, participación mayoritaria estadounidense y la exclusión de la matriz china de decisiones clave. El futuro de la plataforma dependerá ahora de la respuesta de China y de la culminación de los trámites regulatorios en los próximos meses.