La icónica marca de dónuts Krispy Kreme ha irrumpido con fuerza en España, marcando el inicio de una ambiciosa estrategia de expansión en el mercado europeo. Tras generar una notable expectación entre los consumidores, la compañía estadounidense ha desembarcado en el país a través de una joint venture con Glaseadas Originales, liderada por Manuel Zamudio, quien también ejerce como CEO y CMO. Madrid ha sido el punto de partida elegido para esta aventura, que promete transformar el panorama del dulce y el marketing experiencial en la región.
La Estrategia de Expansión y el «Teatro Krispy Kreme»
El primer «Teatro Krispy Kreme» en España, ubicado en el concurrido centro comercial Westfield Parquesur en Madrid, es la piedra angular de esta estrategia. Este concepto innovador opera bajo un modelo de negocio «Hub & Spokes», donde los «Teatros» funcionan como centros de producción diaria, garantizando la máxima frescura de los dónuts que luego se distribuyen a los diversos puntos de venta (Spokes). Este sistema no solo optimiza la logística, sino que también prioriza la calidad del producto final.
El «Teatro» es mucho más que un simple punto de venta; es un espacio experiencial donde los clientes pueden observar en directo el proceso de elaboración de los famosos dulces. La magia se intensifica con el icónico neón rojo «HOT NOW», que anuncia que los Glaseados Originales están recién hechos y calientes, creando un momento inolvidable y multisensorial. La elección de Madrid no fue aleatoria: su dinamismo cultural y gastronómico, sumado al alto flujo de residentes y turistas de Westfield Parquesur (con más de 20 millones de visitantes anuales), la convierte en una ubicación estratégica para consolidar la marca antes de expandirse a otras ciudades como Barcelona o Valencia.
Impacto y Acogida en el Mercado Español
La llegada de Krispy Kreme ha sido recibida con un entusiasmo arrollador en España. Una investigación de mercado previa reveló que uno de cada seis españoles ya conocía la marca, lo que demuestra un arraigo significativo incluso antes de su aterrizaje oficial. Durante los primeros días de apertura, las largas colas y el fanatismo de los consumidores, con más de 100 personas acampando la noche anterior para aprovechar promociones, evidenciaron el cariño y la expectación generada. Este éxito inicial reafirma la convicción de la marca en que la combinación de productos innovadores, una sólida estrategia de marketing y experiencias únicas serán claves para su consolidación.
Marketing Experiencial y Conexión Emocional con el Consumidor
Krispy Kreme ha desplegado una estrategia de marketing experiencial y emocional para conectar profundamente con los consumidores españoles. Previo a la apertura oficial, la marca realizó una acción de alto impacto: el reparto de más de 27.000 medias docenas de Glaseados Originales en lugares emblemáticos de Madrid, como universidades y zonas concurridas, llegando a entregar más de 6.000 cajas en un solo día en Nuevos Ministerios. Estos eventos fueron ampliamente documentados en redes sociales para generar anticipación y «Buen Rollo».
Además, la marca identificó y reconoció a influencers y fans existentes, invitándolos a pruebas de producto y a una fiesta privada pre-apertura. Este acercamiento generó un enorme entusiasmo y una cascada de contenido orgánico en Instagram, YouTube y, especialmente, TikTok, donde el fenómeno se volvió viral. Esta táctica cultivó el «FOMO» (Fear Of Missing Out), impulsando a la gente a experimentar la marca de primera mano. El objetivo principal sigue siendo conquistar al consumidor a través del sabor, la frescura y la calidad de un «Glaseado Original» recién hecho y caliente, una experiencia que, según la marca, «se queda grabado en la memoria para siempre».
Aquí puedes ver una de las publicaciones que la marca realizó en su cuenta de Instagram:
Innovación y Desafíos en un Mercado Dulce Competitivo
La propuesta de valor de Krispy Kreme en España se distingue por su enfoque único en la frescura y la experiencia. A diferencia de otros productos en el mercado del dulce, la marca elabora diariamente sus dónuts, garantizando un producto recién hecho y permitiendo a los clientes observar este proceso en vivo. Desde 1937, Krispy Kreme ha mantenido una receta icónica mientras evoluciona constantemente con nuevas variedades y experiencias que se adaptan a las tendencias del mercado y a los gustos locales.
En el «Teatro Krispy Kreme» de Madrid, se ofrecen hasta 12 variedades distintas, desde el clásico Glaseado Original hasta ediciones especiales que se renuevan periódicamente. Esta estrategia combina la permanencia de los sabores clásicos con la emoción de descubrir novedades y colaboraciones adaptadas a la temporada. Un ejemplo destacado es la colaboración con Nocilla, que ofrece un Krispy exclusivo para el mercado español. La marca también planea futuras colaboraciones con licencias de marcas o películas, siguiendo el éxito global de ediciones con Barbie y Harry Potter. La aceptación de variedades como New York Cheesecake, Oreo, Nocilla y Biscoff demuestra la capacidad de Krispy Kreme para resonar con el paladar español, que valora la calidad, la frescura y un producto bien elaborado.
Compromiso con el Consumidor y Sostenibilidad
Krispy Kreme reconoce la creciente demanda de información y opciones que se adapten a distintos estilos de vida. Por ello, comunica de forma clara los ingredientes y valores nutricionales de sus productos, tanto en tienda como a través de sus canales digitales. La marca se posiciona como un producto indulgente, ideal para ocasiones especiales como reuniones familiares, encuentros con amigos o celebraciones en la oficina, vendiendo principalmente sus productos en cajas. Entienden que, si bien son un capricho, la clave está en el balance con un estilo de vida activo y saludable. Actualmente, todos sus productos contienen harina de trigo, lo que significa que no son aptos para dietas sin gluten.
Proyección Futura: 50 Locales y Expansión Europea
El plan de Krispy Kreme para España es «ambicioso», con la meta de alcanzar los 50 locales en los próximos cinco años. De estos, cinco serán «Teatros Krispy Kreme» que funcionarán como centros de producción bajo el modelo Hub & Spokes. Solo en el primer año, la marca prevé abrir una docena de establecimientos.
La inversión estimada para este crecimiento ronda los 20 millones de euros, con el objetivo de consolidar la marca como un referente querido por los consumidores españoles. Además de expandirse en grandes ciudades, la estrategia incluye llevar la oferta de Krispy Kreme a supermercados, estaciones de servicio y grandes superficies, ampliando así su accesibilidad. A nivel europeo, la visión de la compañía contempla la llegada a Portugal en los próximos dos o tres años, marcando un paso más en su expansión internacional.